El cuidado personal es un término utilizado en temas legales para referirse a la responsabilidad que tienen los padres sobre la vida y el bienestar de sus hijos menores de edad. También se le conoce como «tuición» o «custodia».

El cuidado personal implica tomar decisiones importantes sobre la crianza, educación, salud y bienestar general de los hijos. Esta responsabilidad puede ser ejercida por uno o ambos padres, dependiendo de la situación y de lo que se establezca en un acuerdo o sentencia judicial.

El cuidado personal es una figura jurídica que busca proteger los derechos e intereses de los niños, niñas y adolescentes en situaciones de separación o divorcio de sus padres. Los beneficios que se derivan del cuidado personal son varios, entre ellos:
Protección del interés superior del niño, niña o adolescente, que es un principio fundamental que se debe resguardar en todas las decisiones que afecten a su vida.
Establecimiento de un régimen de visitas y comunicación adecuado, que permita mantener una relación positiva y afectiva con ambos padres.
Designación de un cuidador responsable y capacitado, que vele por la salud, bienestar y desarrollo integral del niño, niña o adolescente.
Facilitación de la toma de decisiones y la resolución de conflictos relacionados con la crianza y el cuidado de los hijos.

Para solicitar el cuidado personal de un niño, niña o adolescente, es necesario presentar una demanda ante los Tribunales de Familia. Esta demanda debe estar fundamentada en los hechos y razones que justifiquen la necesidad de otorgar el cuidado personal al demandante.